El Papa pidió perdon por atrocidades cometidas por cristianos contra referentes de pueblos origizarios.
Al finalizar su primer discurso, el Papa devolvió a los pueblos indígenas los mocasines que la delegación Métis le había entregado en el Vaticano cuando lo visitó en marzo. En la audiencia de hace cuatro meses le habían dado el calzado al pontífice «como gesto de la voluntad del pueblo Métis a perdonar si hay una disculpa significativa de la Iglesia», expresó a Télam la presidenta del Consejo Nacional, Cassidy Caron.
«En ese momento me entregaron en prenda dos pares de mocasines, signo del sufrimiento padecido por los niños indígenas, en particular de los que lamentablemente no volvieron más a casa de las escuelas residenciales; me pidieron que devolviera los mocasines cuando llegara a Canadá», dijo el Papa antes de devolverles el calzado.
«El recuerdo de esos niños provoca aflicción y exhorta a actuar para que todos los niños sean tratados con amor, honor y respeto, pero esos mocasines también nos hablan de un camino, de un recorrido que deseamos hacer juntos», los animó.
Los mocasines, que el Papa identificó como un símbolo del «caminar juntos» para el futuro, evidencia para los indígenas «que aunque el papa Francisco no lleva los zapatos rojos tradicionales de papa, camina con el legado de los que vinieron antes de él: lo bueno, lo grande y lo terrible».
